Como dijo mi mejor amiga un día, ¿qué puede ser peor que querer admitir que una no está enamorada, y cada día tener a alguien que te lo recuerde? Saber que todos los días te levantás pensando en esa persona, y es justo esa misma la que todos los días se encarga de darte la decepción más grande, porque sabés que nunca vas a poder decirle todo lo que sentís, porque no sólo arruinarías todo, sino que ya no gozarías del derecho de seguir hablándole, y de compartir esos momentos gratos que querías pasar con él. Pero al final, ¿de qué momentos gratos hablamos si lo único que hago es mentirle sobre lo que siento, y siendo YO, YO MISMA, la odia la mentira?
¡Qué hipócrita! , de todas formas creo que no lo hago solo por mí, sino que lo hago por los dos. No formaría parte de esta maravillosa historia, no ya no, si te lo dijera, además creo que de todas formas debería tenerte enfrente, mirar tu boca en cada momento que te dirijis a mí, verte reir mientras digo algo que te de risa, y ver como son tus expresiones cuando te hablo, solo y solo en ese momento me voy a dar cuenta si esto es realmente lo que pienso que es. Por el otro lado, estás vos, que estás demasiado "ocupado" intentando rehacer tu vida, y yo, no sé, yo no formo parte de esa vida, no me tengo que mentir, yo soy alguien que está más alejado que yo misma de mí, y que pretende y piensa que es algo importante, que en verdad no es. Que sufre, que se ilusiona todo el tiempo, y todos los días.
De todas formas, ahora no puedo no decirme a mi misma, que lo que siento es Amor, y que estoy casi segura de que tengo tanto miedo, tanto miedo, que me escondo y decido admitir que estoy totalmente encaprichada... Y sí, no soy correspondida, y eso siempre me dolió.
Pero bueno, una vez más, voy a intentar seguirte haciendo lo bien que te hice siempre, porque me hace feliz por un lado ver que por lo menos, lo que más quiero, o lo que yo pienso que más quiero, puede ser más feliz que yo.