noviembre 01, 2016

Cada tanto recibo la sacudida más grande, el golpe más duro, los cortes más profundos. Y es que cuando uno sufre dolores tan intensos, tan desgarradores, no puede seguir así como así. Debe volver a sentirlos en algún momento para recordar. Recordar que venís de ahí, que estás dañada, que ya estás cortada, golpeada y aturdida, y que eso te hace ser quien sos ahora. 

No hay comentarios.: